Narcís Serra, Economista, político y expresidente del Gobierno de España, inicia su cátedra estableciendo que para solucionar una crisis global como la que se vio en 2008, se necesitan soluciones globales. Identifica que la crisis se debe a una suma de errores. Todos fallos individuales atribuibles a cada nación involucrada, los que rápidamente se volvieron globales en su simultaneidad. Las reflexiones de Serra sobre la crisis, respaldado por un fino rigor económico que sin embargo aterriza en una constante sospecha sobre la economía, son un llamado a la colaboración: elabora una meditada confianza en la política internacional y en la intervención del sector público.